La mala educación
No es la película de Almodóvar, es la Realidad Nacional. Es innegable que muchos niños no aprenden lo que deben y que la educación publica se esta convirtiendo en un mito. Muchos involucrados sienten que ya todo esta perdido y los docentes hacen su trabajo con desgano, porque, llegan a decir con cinismo, de todas maneras los niños no aprenden (todas las estrellas protejan a mi Ximena, que futuro le espera.

Los psicólogos y pedagogos saben que hay quien considera que la educación exclusivamente es la modificación de la conducta, comparándola con el entrenamiento de los animales, el comportamiento (respuesta) condicionado. Porque no están considerando la capacidad de inferir nuevos conocimientos a partir de los ya adquiridos, por ejemplo, ni el libre albedrío para hacerlo o no (cosa que ya no quise discutir con el supervisor de la entrada anterior).

No estoy de acuerdo con eso y lo comentaba con mi media naranja que es Maestra de Matemáticas. Ella sostenía que hay un limite biológico, en el que a cierta edad ya es imposible cambiar (a perro viejo no se el enseñan trucos nuevos). Que te vuelves mañoso con la edad. Yo no estoy de acuerdo tampoco con ella. Yo aprendí que el cambio es una experiencia de aprendizaje, como se Titulo una conferencia que dieron en el Tecnológico Tunero hace ya varios años. Y yo digo que solo pierdes la capacidad de cambiar deliberadamente cuando orgánicamente eres incapaz de hacer conexiones neurales.

Hay, según yo, varios niveles de aprendizaje. Uno donde adquieres el conocimiento, otro donde comprendes como fue que lo adquiriste y eso lo usas para aprender cosas que no hay quien las enseñe, y otro donde te auto educas. Pero sé que debes decidir aprender para lograrlo, en cualquiera de esos niveles y sobre todo en el ultimo.

Yo lo se porque rudimentariamente lo he hecho. Porque he modificado concientemente mi conducta para poder convivir con mi media naranja (bajar la tapa de baño, no sonar la cucharilla en la taza de café, etc), aunque solo como adiestramiento animal, pero también he logrado formarme hábitos de un modo conciente, no por pura fuerza de voluntad. Descubrí que puedo aprender muchas cosas nuevas de la misma forma que aprendí otras muy diferentes, como otro idioma, otras disciplinas tecnológicas, tocar guitarra etc. Si los maestros pudieran comprender como es que cada uno de los alumnos aprenden, o tal vez se descubrieran perfiles de aprendizaje mas generales, no tratarian de que todos los alumnos aprendiweran con la misma explicación, serian mas eficientes.