Cronicas de Papá Cuervo II
Ximenita tuvo una temporada hace poco que dormía con su abuelita. Eran lágrimas y berridos como más los aborrezco para que la dejáramos. Solita se le pasó, como si presintiera que ya había acordado con su mamá el complot en contra. Ahora que tengo el turno de la noche se duerme en nuestra cama para sentirme en la mañana. Me saluda, me deja dormir de corrido y despues se acuesta a ver la tele conmigo.

Soy su héroe sin necesidad de ser perfecto. Soy definitivamente más lento que mi media naranja para vestirla, pero Ximenita me tiene mucha paciencia y hasta me ayuda, porque coopera bastante. Cuando regreso del trabajo me abraza, me acarici la car con sus manitas, me da besos, apoya su frente en la mia y siente mi rostro con el mio. El tacto del rostro es muy importante para nosotros. Es como si quisieramos absorber a la otra persona.

Con mi media naranja aprendí a ser menos seco ya hacer cariños. Pero eso fué para ablandarme. El expresar libremente emociones y sentimientosde forma palpable lo aprendí de Ximenita. Como dice la cadena, no sé si los hijos nos fueron dados para enseñarles o para aprender de ellos.

"Cuando veo dientes de león, veo hierba dañina invadiendo mi patio.
Mis hijos ven flores para la madre y soplan la pelusa blanca pensando en un deseo.

Cuando veo un mendigo que me sonríe, veo a una persona sucia que probablemente quiere que le de dinero y eso me pone molesto.
Mis hijos ven a alguien que les sonríe y ellos responden con otra sonrisa.

Cuando oigo una música, me gusta. Pero no sé cantar y no tengo ritmo; entonces me siento y escucho.
Mis hijos sienten el ritmo y bailan y cantan y si no saben la letra, crean la suya propia.

Cuando siento un fuerte viento en mi rostro, me esfuerzo contra él. Lo siento despeinándome y empujándome para atrás cuando voy caminando.Mi hijos cierran sus ojos y abren sus brazos y vuelan con él, hasta que se caen y rien en el suelo.
Cuando veo un charco de lodo lo eludo porque en él veo zapatos enlodados y tapetes sucios.
Mis hijos se sientan en él.Ven represas para construir, ríos para cruzar y bichos para jugar".


El inge Hidalgo, decia el otro día que el conflicto con los jóvenes es porque ellos tienen (tenmos)la energؙía para luchar por ideales, y los adultos ya renunciaron a ellos. Y entendí que la brecha genracional, surge cuando olvidas como pensabas de niño y tratas de que todos sean tan adultos como tú. Sobre todo cuando olvidamos aunque tengamos la ventaja de la experiencia (que no los deja entender como pensamos), no podemos saber exactamente que estan sintiendo a esa edad. Yo espero que llegado el momento hable de distinguir cuales ideales valen la pena, aunque yo no los haya logrado y muestre puertas para abrir en lugar de quejarme de las que me cerré a mi mismo. Desde Lizzie, aprendí a no mentirles a los niños, pero sin robarles la ilusión y la fantasía.

Creo que la única ventaja que tengo para entender a Ximenita, es que nunca he dejado de ser niño. Mi media naranja a veces se pone en plan de madre sometida por el quehacer. Yo le trato de hacer ver cuando trapear el piso detras de Ximena no tiene ningún caso. Es mejor enseñarle a Ximena cuando se puede hacer tiradero (porque se debe poder, es un caldo de cultivo para la creatividad)y cuando no.